Devocional 12-11-2022
Si tienes seriamente el deseo de convertirte en un hombre o mujer de integridad, el primer paso es admitir que tú no has tenido integridad.
Si tienes seriamente el deseo de convertirte en un hombre o mujer de integridad, el primer paso es admitir que tú no has tenido integridad.
En un mundo que está absolutamente obsesionado con la apariencia e imagen, ¿cómo puedes mantener la realidad cuando todos los demás fingen?
Cuando tienes integridad, te conviertes en el tipo de persona que a los demás les gusta tener cerca porque sabes quién eres y para dónde vas.
El ser una persona con integridad no significa ser perfecto, porque si así fuera, ninguno de nosotros podría ser íntegro.
¿Quién te ofende? ¿Cómo puedes mostrar amabilidad a esa persona esta semana de manera intencional?
¿Quién necesita que le des una segunda oportunidad? ¿Cómo puedes mostrar a esa persona misericordia y compasión esta semana?